30 de noviembre de 2014

El sueño de la casa propia se hace pesadilla en la ciudad del PRO (II)



Fuente: Jusbaires.gob.ar

“No podemos perder $ 2 millones diarios con Aerolíneas, con ese déficit anual, yo urbanizo todas las villas porteñas”. El inefable jefe de Gobierno Mauricio Macri es el autor de la desvergonzada frase. No hace falta defender a Aerolíneas Argentinas y su plan estratégico a largo plazo que a partir de su estatización está permitiendo la renovación de la flota, el aumento de vuelos para garantizar la cobertura de todo el territorio nacional allí donde el mercado no está interesado en ofrecer vuelos porque “no es negocio”, la descentralización de los vuelos (ya no todo pasa por Buenos Aires), y una lista de largos etcéteras.

Aunque a decir verdad, no tendríamos que sorprendernos por el hecho de que a Macri no se le caiga la cara haciendo gala de su demagogia berreta, cuando el PRO viene subejecutando presupuestos para vivienda en la ciudad. Como señalamos en una nota anterior, del total del presupuesto que el Poder Ejecutivo de la Ciudad tuvo asignado entre 2008 y 2013 para solucionar la problemática habitacional, $2.462.732.230 (sí, casi dos mil quinientos millones de pesos) no fueron utilizados. Esto implica una sub-ejecución del 25% para todo el período. O sea, si el déficit de Aerolíneas Argentinas es de $730 millones anuales, Macri dispuso de más del triple de ese presupuesto y no erradicó ni una villa. ¡Cara rota!


24 de noviembre de 2014

Los jóvenes y los Derechos Humanos hoy




Hace unos cinco años, por recomendación de Graciela Daleo y por su insistencia militante que agradecemos y valoramos, empezamos a concurrir con los estudiantes de la materia Poder Económico y Derechos Humanos[1] a las audiencias por los juicios de Terrorismo de Estado que se están llevando a cabo en nuestro país desde hace diez años. Este proceso que, no exento de dificultades, tiene lugar en un proyecto político en el que el juzgamiento de los responsables del genocidio que nuestro pueblo sufrió en la última dictadura militar resulta ser un eje central.  


Personalmente, pienso y siento que se trata de una experiencia muy intensa para nosotros como docentes-educadores, evidenciada en la posibilidad de acompañar una vivencia particularmente significativa, no sólo por la importancia que tiene que desde cátedras libres de Derechos Humanos que forman parte de la Universidad Pública se promueva este tipo de acciones, sino además por lo que subjetivamente despierta en los estudiantes que concurren.


Nos ronda, nos interpela la aparentemente simple pregunta sobre cómo impacta en estos estudiantes el tomar contacto con esa dolorosa parte de nuestra historia sobre la que, en la mayoría de los casos, tienen pocas referencias. Qué significa en la vida de una persona joven, generalmente no politizada, asistir a la audiencia de un juicio en el que los acusados de su propio país han formado parte de una maquinaria de matar estatal (de la que son sujetos concretos responsables). Y qué significa que la propia justicia argentina los juzgue.
Hablamos de personas, quizás ajenas a la militancia y a la historia del movimiento de Derechos Humanos en Argentina, que se conectan con la temática desde un lugar simple, concreto, sin posicionamientos políticos demasiado elaborados o pensados.

Perseguir, aterrorizar y secuestrar. Torturar, violar, desaparecer y asesinar formaron parte de la cotidianeidad de los centros clandestinos de detención que funcionaron en todo el país durante la dictadura del `76. Afirma Pilar Calveiro [2] que “no toda sociedad engendra este tipo de dispositivos” y explica que en “el proceso global desaparecedor se genera una larga cadena de mandos en la que cada subordinado es un ejecutor parcial, que carece de control del proceso global. (…) Las acciones se fragmentan, las responsabilidades se diluyen (…) El asesinato político, la tortura, se aplica en el país después del golpe del ´30 sobre prisioneros políticos. El secuestro y posterior asesinato se empieza a practicar en los años ´70. Pero todas esas prácticas se diferencian de manera sustancial de la desaparición de personas, que es una referencia literal: una persona que a partir de determinado momento desaparece, se esfuma, sin que quede constancia de su vida o de su muerte.”.


Quizás resulte más genuino compartir algunos fragmentos de las notas de los propios estudiantes que presenciaron la audiencia en la que la fiscal de la causa Vesubio II [3] presentó el alegato final: 


En principio es la primera vez que estoy en un tribunal. Lo primero que remarca la fiscal  es que los hechos llevados a cabo fueron con un solo fin: “Instalar un nuevo patrón económico en nuestro país” y que a toda persona que se opusiera había que exterminarla.” (…)
(…) “trato de imaginarme esa época, ya que nací en 1977 y me cuesta ver como el pueblo no se daba cuenta de toda esta red clandestina de detenciones, tortura y aniquilamiento de sus pares, independientemente a la ideología está el derecho a la vida; por qué permitió eso el pueblo” (…)



(…) “en su alegato, la fiscal remarca que el objetivo principal de la dictadura fue el de eliminar la resistencia para imponer un modelo económico que beneficie al capital extranjero y a unos pocos capitales nacionales cercanos al poder. Para esto se tuvieron que destruir todos los beneficios logrados por los trabajadores a lo largo de décadas y exterminar a la industria nacional” (…)


(…) “Cuando nos fuimos de la sala vi que muchas personas del público se saludaban y era como si se conocieran. Pienso que los une el dolor, la lucha, el sufrimiento, el legado que les dejaron sus compañeros desaparecidos, los familiares y la impotencia frente a esos individuos, ante las situaciones relatadas por la fiscal. Sentí que a partir de ese momento yo también los conozco un poco y comparto una parte de sus sentimientos.” (…)





 Política y Política de Derechos Humanos:


Al interior de lo que se ha construido históricamente y se reconoce como la militancia ligada a las organizaciones de Derechos Humanos hay posiciones diferenciadas en relación a la política impulsada por el Gobierno Nacional al incorporar como propias (y dar respuesta) a las reivindicaciones históricas del movimiento de Derechos Humanos en Argentina, política en la que se inscribe el proceso de juzgamiento a los genocidas de la dictadura. 
Hay quienes nos conmovemos y reconocemos en estos juicios una radicalidad a nivel mundial; otros, evalúan que se podría hacer mucho más, que los procesos son muy largos, que los represores, muchos de ellos de edad avanzada, se van a morir antes de ir a la cárcel, que se ha avanzado muy poco en el juzgamiento a civiles empresarios y eclesiásticos, que las causas deben ser unificadas cuanto antes a fin de evitar que los testimoniantes tengan que declarar una y diez veces lo mismo, rememorando el horror vivido, cuestiones seguramente atendibles, sobre todo esta última. 
Hay quienes afirman que lo hecho hasta ahora es un logro exclusivo de los organismos de Derechos Humanos y hay quienes ven afectada su propia identidad política, construida valientemente en la lucha contra el autoritarismo del Estado y sienten que el kirchnerismo se las ha arrebatado. Quizás el ausente en este tipo de posiciones sea el “cómo”, porque aparentemente  el “hacia donde queremos ir” está muy claro: “memoria, verdad y justicia”. 
En ese caso, deberíamos pensar en los momentos, las etapas, los apresuramientos, las pérdidas de tiempo, las alianzas, las rupturas, las limitaciones institucionales y las trabas jurídicas, las contradicciones del propio Estado, las contradicciones individuales, qué cosas hacer, qué cosas no hacer, y algo sumamente difícil: qué cosas posponer hasta alcanzar condiciones más favorables para concretarlas. 







[1] Materia perteneciente a la Cátedra Libre de Derechos Humanos de la facultad de Ciencias Económicas, UBA, optativa para las carreras de esa facultad.

[2] Pilar Calveiro (1998). Poder y Desaparición. Ediciones Colihue. 


[3] Audiencia del jueves 30 de octubre de 2014 en el juicio “Vesubio II”, Tribunales de Comodoro Py. 

14 de noviembre de 2014

Hacer Lugar a la Cultura en Buenos Aires (II)







 El fin de semana pasado se realizó un festival en apoyo a la Ley de Centros Culturales.  Más de 2000 personas participaron en el evento para impulsar la iniciativa, que, tal como habíamos contado, se presentó el pasado 29 de agosto en la legislatura porteña.  La propuesta busca establecer un marco regulatorio para los espacios culturales autogestivos en la Ciudad de Buenos Aires, que desde hace años padecen los desmanejos de la política cultural del gobierno de Macri.


El proyecto -que surgió del MECA (Movimiento de Espacios Culturales y Artísticos) y fue trabajado y presentado por el interbloque kirchnerista - aparece como una propuesta para frenar los embates del macrismo contra los espacios independientes. La iniciativa y abre interrogantes sobre la necesidad de superar la mirada mercantil de la cultura y del Estado como controlador.



7 de noviembre de 2014

Se presentó la revista Horizontes del Sur




El pasado martes 4 de noviembre a las 19 hs, en la Sala  Juan L. Ortiz del Edificio de la Biblioteca Nacional, tuvo lugar el lanzamiento de la Revista Horizontes del Sur. El panel de presentación estuvo integrado por el presidente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, Mart{in Sabbatella, quien escribió una nota para el primer número y fue definido por el director como “el mentor político del proyecto”. También estuvieron presentes el director de Horizontes del Sur, el politólogo Edgardo Mocca, Antolín Magallanes, miembro del Consejo Editorial de la revista, y el periodista, politólogo e historiador Hernán Brienza.

Al calor de las conquistas de los últimos años tanto en el territorio nacional como en la región Latinoamericana nace esta publicación de alto contenido político y que pretende un análisis de la coyuntura y de los actores sociales, políticos y económicos que son parte de la construcción de los procesos de transformación de la última década pero que también abarca el análisis de lo que ocurre a nivel global.

En el marco de la disputa sobre qué proyecto de país queremos los argentinos, si uno que contemple a las mayorías populares, con inclusión y ampliación de derechos, donde las decisiones las tome los representantes elegidos por la voluntad popular, o uno en el que los destinos de la patria los sigan marcando las corporaciones económicas y/o mediáticas, y a tan solo un año de las elecciones presidenciales, Horizontes del sur fue creada, armada y diseñada por un colectivo de intelectuales y dirigentes comprometidos que hacen una interpretación de la realidad política local, regional y global.

La publicación se define como una iniciativa política que no es neutral sino que forma parte de un conjunto social unificado, alrededor de un proyecto de país y de un sentido de la política cuya expresión nacional es el kirchnerismo. Propone además dar un debate sobre la profundización de los procesos de transformación nacional y de la región, apuntando a fortalecerlo, contrastándolo con las políticas neoliberales, sin por eso dejar de mencionar los aspectos contradictorios o deficitarios de la experiencia de estos años.

A continuación, reproducimos algunas de las declaraciones más sobresalientes del panel durante la presentación:

Antolín Magallanes
: “Esta revista es un material importante para leer, para pensar, para estudiar, para militar. Una revista para poder militarla, una revista para poder utilizarla en los lugares donde llevamos adelante la política. Entonces queremos que ése sea el espíritu de ustedes cuando se la lleven, o sea el espíritu de un militante en el sentido de que la podemos transmitir a otros lugares.”.

Edgardo Mocca: “Queremos que la gente se siente a discutir con la revista al costado, queremos probar hasta las últimas consecuencia este valor de la palabra escrita (…). Aspiramos a ser una de las expresiones dignas de un debate de época y nacemos como producto político intelectual de una etapa. Los meses que nos separan de diciembre de 2015 van a ser meses de una intensidad muy fuerte, de una exigencia muy grande y dónde nos jugamos cosas muy importantes para el futuro inmediato y no tan inmediato de la patria.”

Hernán Brienza: “Que Horizontes del Sur pueda ser leído y pueda ser comprendido por las generaciones que vienen y que sean motivo de ese orgullo o de esa fantasmagoría que alguna vez yo sentí cuando leí UNIDOS en los 80.”

Martín Sabbatella: “La revista se da en un contexto histórico particular, es hijo de este momento histórico, que tiene como rasgo de identidad constitutiva haber recuperado la pasión, la política para que este en el centro de la escena pública, haber recuperado el valor de las ideas, el debate de las ideas. Haber recuperado la capacidad transformadora de la política como herramienta de cambio y la palabra política como herramienta de transformación.”
“El kirchnerismo es una identidad fundante del nuevo momento histórico de nuestro país. Y como identidad, nació para quedarse. Hay un desafío  profundo por organizar, por unir esa identidad y poder consolidarla. En ese sentido el kirchnerismo construyó un sentido de pertenencia.”. “Queremos ganar por lo que se hizo y por lo que falta y porque nuestro pueblo y porque nuestra patria lo necesita queremos construir y ser capaces de construir la mejor propuesta para darle continuidad después del 10 de diciembre de 2015 y a eso es a lo que hay que apostar.”


Acompañaron el lanzamiento:

Mónica Macha, senadora provincial del bloque Nuevo Encuentro.
Gabriela Cerruti, diputada de la Ciudad de Buenos Aires por el interbloque Nuevo Encuentro-FPV.
Héctor Recalde, diputado nacional del FPV.
Darío Díaz Pérez, intendente de Lanús.
Carlos Girotti, de Carta Abierta.
Hugo Yasky, CTA.
Glenn Postolski, Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.
Carolina Mera, Directora del Instituto Gino Germani de la UBA.
Horacio González, director de la Biblioteca Nacional.